El chocolate como arte

¿Alguna vez te has preguntado por qué, históricamente, el chocolate siempre ha desprendido una esencia que traspasa cualquier límite a nivel gastronómico? Convertido en poco menos que un símbolo cultural para una gran cantidad de sociedades, las principales marcas del sector han logrado imprimir una vertiente estética que trasciende de los límites conocidos.

En Leoter, como distribuidor de chocolate en Tenerife, contamos con algunas de las mejores marcas del sector en la escena chocolatera. Nuestro compromiso con el cliente por lograr la máxima excelencia se convierte en una de nuestras principales señas de identidad. Por ello, contamos con marcas de gran tradición. Este es el caso de Amatller y su capacidad para tratar al chocolate como si de un arte se tratase. ¿Quieres conocer más a fondo su metodología de trabajo y su historia?

Chocolate como arte: 300 años conviertiendo al chocolate en arte

Fue en el año 1797 cuando se muestran las primeras referencias de Chocolates Amatller en España. Concretamente, en Barcelona. En el barrio de El Born. Tras la producción se encontraba Gabriel Amatller, uno de los nombres propios en lo que a producción y distribución del chocolate se refiere.

Tras estos primeros pasos, en la década de los 40, se abrió la primera fábrica de chocolates de la marca. Uno de sus grandes hitos, y también uno de los motivos por los que rápidamente se diferenció del resto de las empresas del sector es su ritmo de producción. Siendo capaces de almacenar hasta 11.000 kilos de chocolate al día.

Históricamente, Chocolates Amatller siempre se ha consolidado como una de las grandes referencias de este ámbito de trabajo. No obstante, fue con la muerte de Teresa Amatller en el año 1960 cuando la propiedad de la compañía cambió. Simón Coll, la empresa especializada del sector, optó por ejecutar la compra de la compañía. Consolidando así una estrategia en la que el chocolate se convertía en la principal seña de identidad de la firma. Siendo uno de los momentos más destacados en la historia del chocolate en nuestro país.

Una tradición que permite ejecutar el éxito de la compañía

En el Siglo XIX, con la llegada de la producción industrial a los artículos de consumo, Chocolates Amatller logró consolidar un ritmo de producción inédito hasta entonces. Un escenario que se consolidó al mismo ritmo que la producción de publicidad gráfica permitía consolidar la estrategia de marca.

Las nuevas formas que permitía la imprenta moderna, permitía anunciar y posicionar el producto de una forma mucho más rápida y consolidada. Cada vez más, los publicistas más destacados se encontraban interesados en colaborar con la fábrica de chocolate para anunciar sus productos más destacados. Desatando su faceta más creativa y elevando a un nivel superior el concepto de publicidad tal y como lo conocíamos hasta el momento.

Antoni Amatller logró interiorizar las nuevas tendencias del mercado como nadie lo había hecho nunca. Comportándose como si de un creativo más del modernismo catalán se tratase. Respetando al máximo la producción chocolatera, pero añadiendo las técnicas más innovadoras en sus fábricas y formas de venta. Logrando que sus productos fuesen especialmente destacados en el mercado.

chocolate como arte

En Leoter Tenerife, como distribuidor especializado de chocolate en Tenerife hemos realizado una fuerte apuesta por este producto como uno de los símbolos de nuestra cultura. Concentrando en nuestro catálogo las mejores marcas de chocolate del sector, como es el caso de Amatller, podrás encontrar una amplia gama de productos con las que conquistar a los paladares más exigentes. ¿A qué esperas para satisfacer todas tus necesidades?

Post by Leoter Tenerife

Comments are closed.